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Carlos Sainz cosechó una brillante victoria en México. Es la cuarta de su trayectoria en la F1. Su fin de semana fue impecable. El sábado logró la pole y luego en el Día D y a la Hora H ofreció una clase magistral.
El '55' va a dejar las filas de Ferrari dejando un grato recuerdo tanto en el equipo como en los tifosi. De eso no cabe la menor duda. El año que viene correrá en Williams, ya que los de Maranello han fichado para la campaña venidera al heptacampeón Lewis Hamilton. El de Stevenage formará un Dream Team con Charles Leclerc a partir de 2025.
Frío saludo tras la victoria del '55'
El caso es que en las últimas horas se ha especulado mucho sobre la relación existente entre el monegasco y el español. Todo viene por un vídeo que circula por las redes sociales que recoge un episodio tras la disputa de la carrera celebrada en el Autódromo Hermanos Rodríguez. En el parque cerrado se ve a Sainz cruzarse con un Leclerc visiblemente enfadado. Parece que el '16' no hace caso al madrileño, ni le felicita. Pero es que existe una grabación anterior en la que sí saluda de forma educada al brillante ganador de la cita azteca.
Leclerc estaba enojado por haber perdido la segunda plaza. Se la arrebató in extremis un Lando Norris que ya está a 47 puntos del líder Max Verstappen. Al monegasco le frustró mucho perder esa posición porque está luchando con el de Bristol por ser subcampeón. Lo de ganar el Mundial parece una quimera para el de Ferrari, ya que cuenta con una desventaja de 71 puntos con respecto al tricampeón neerlandés. Cazar al de McLaren es mucho más factible. Son 24 puntos los que separan a segundo y tercer clasificado del certamen.
Leclerc, visiblemente enojado
Sea como fuere, Leclerc estaba enfadado con lo que le había sucedido. No le sentó mal que ganara su vecino de garaje, lo que le frustró es perder puntos valiosos en la recta final de la carrera. Por eso le felicitó de forma fría dando la mano a Sainz. Es más, el monegasco pronunció palabras malsonantes en la rueda de prensa posterior al evento (soltó un "joder" que no le ha hecho gracia a la FIA).
No obstante, los cabreos de Leclerc no suelen durar mucho. Todo lo contrario. Una vez que ha procesado lo sucedido, el '16' pasa página. No es de los que guardan rencor, ni mucho menos.
Así que esa frialdad no prueba nada de nada. Carlos y Charles se llevan bien. No son amigos del alma, pero su relación es buena. El '55' sí tiene una gran amistad con Norris, puesto que ambos crearon un vínculo especial en la etapa del madrileño en McLaren. Pero lo cierto es que Leclerc es una persona amable, educada y con buenos modales. Y eso se nota hasta en su cordialidad a hora de tratar con la Prensa española.